Llegué a
casa haciendo ruidos con ahora mi acompañado anillo — ¿Por qué tan feliz? —
preguntó Agata al verme entrar mientras hundía una cuchara en un bote de
helado.
Me senté en
una silla en frente de ella apoyando mi cabeza en la palma de mi mano —Sam me
ha pedido que vaya a vivir con él — dije tranquila, era la primera vez que
Agata me veía un poquito animada en más de un mes.
—¿Ese chico
está loco o qué? — dijo Agata apartando su helado para hablar ahora con
seriedad y yo aprovechando la ocasión para meterme una cucharada en la boca ya
que no había comido la gran cosa en la cena.
—Déjame
explicarte — tragué precipitadamente sintiendo el frío en mi garganta — Sólo
serían de jueves por la noche a lunes por mañana, contando que él me llevaría
clases —dije repasando la conversación que había tenido con él en el coche —
Pasaría aquí gran parte de la semana, ¿por favor? — dije haciéndola una
plegaria y ella me quitó el helado bruscamente para comer de él.
—Yo que tú
regalaría condones a Nina desde ya si se va a ir a vivir con él —soltó una risa
desde el sofá Ulisse.
—Procura no
dejar tú embarazada a Carla inútil —dije girándome para ver su cabeza.
—No te digo
yo que no la dejaría embarazada si viviésemos juntos — admitió reflexionando
— ¿Tienes preservativos?
—alzó una ceja Agata.
— Sí — dije
tajantemente.
No hay comentarios:
Publicar un comentario