Listaa

martes, 20 de octubre de 2015

Página 503.

-¿Y qué?- le corté con un nudo en la garganta riendo nerviosamente- ¿Crees que irá a mi casa con una bolsa de regalos a cambiar todo lo que ha sucedido en estas dos semanas? Carla, es obvio...él no quiere saber de mí, se ha olvidado de mí por completo, él ni si quiera me ha mencionado delante de nadie cuando yo le he llamado y esperado cada día, han pasado dos semanas, Carla, dos, si de verdad hubiese querido decirme algo no esperaría a navidad y simplemente me hubiese mandando un texto ya- comenté llorando- Lo elimina Carla, los borra, los lee y los borra, no sale de la habitación cuando sabe que estoy allí, creo que está claro que no quiere saber nada de mí y la navidad, y los chocolates, y los renos, la nieve y Papa Noel, por mucho que se lo pida y lo desee no hará que cambie eso. Carla, estamos encerradas en el instituto los pocos que no hemos conseguido aprobar para navidades, no tenemos vacaciones y malgasto el tiempo libre de tarde que tengo que pensar e ir a visitarle... él hubiese hecho algo ya, la navidad no cambiará nada.
-Nina... tal vez sólo, sólo no tiene tiempo.
Me separé de su agarre -¿Que no tiene tiempo? ¿ Y por qué yo para él sí que lo tengo? Se pasa tumbado en una cama todos los días Carla, tiene tiempo de sobra...- cogí aire doliéndome lo que iba a decir en voz alta.- Simplemente creo que es hora de aceptar que hemos terminado y que lo nuestro no tiene por dónde cogerse- negué llorando- Han pasado demasiadas cosas cómo para que se puedan arreglar con palabras- me limpié las lágrimas de los ojos-  Él lo jodió tanto Carla.
-Lo sé...-dijo preocupada y me puse en pie.
-No Carla, tú no sabes nada- comenté ahora enfadada y rebusqué en mi mochila el llavero que me había regalado en su día mientras lo tiraba al suelo y veía cómo caía por el hueco de la grada- Hemos terminado- dije en voz alta para creérmelo, colocándome la mochila en el hombro y bajando las escaleras rápido.
-Nina...- chasqueó su lengua Carla viendo como me alejaba negando y sintiendo mi dolor. -¡Por muy lejos que te vayas no se irá! -dijo en alto- Recuerda que aun que vayas más rápido dónde llegarás será el mismo lugar- me giré despacio- Nina, aunque corras la sala de espera no se habrá movido de ahí, estás corriendo por algo estúpido y sin sentido. Debes correr por las cosas que de verdad merecen la pena en la vida.
Limpié nuevas lágrimas -Yo ya no tengo energía para correr a ninguna parte-siseé dándome la vuelta y alejándome de nuevo.
-Nina, si esto te está haciendo tanto daño olvídate de él, haz como si estuviese muerto - gritó.
-Entonces querré llevarle flores- repuse abatida y miserablemente, sabiendo, que de esta, no saldría.


*Fin del flashback* 

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